15 de Abril 2011
fuente: Ángel Guardián
Desde hace casi dos años, la Universidad de Colima y su rector, estimado colimense, Miguel Ángel Aguayo López, habían sido cuestionados por un alto ex funcionario jubilado, algunos investigadores inconformes y un dirigente político resentido; todos ellos con pasado tormentoso.
Sus falsas apreciaciones causaron molestia irritación a la comunidad universitaria, porque a toda luz lo que buscaban los falsos redentores no era otra cosa que desacreditar el trabajo cotidiano de los universitarios y el propio rector Aguayo López, que a seis años de su gestión ha sido altamente productivo y reconocido por propios y extraños.
Sus falsas apreciaciones causaron molestia irritación a la comunidad universitaria, porque a toda luz lo que buscaban los falsos redentores no era otra cosa que desacreditar el trabajo cotidiano de los universitarios y el propio rector Aguayo López, que a seis años de su gestión ha sido altamente productivo y reconocido por propios y extraños.
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